
Me cuesta mirarlo a la cara y decirle que lo quiero. Me cuesta mirarlo y saber dentro mío que el no es el indicado aún siendo buena distracción. Disculpen, el término el indicado no esta bien. No hay una persona indicada. No existe. Pero si están aquellas con las que nos llevamos mejor, que nos alivian el dolor y nos ayudan a sonreír incluso en los momentos en que estamos mal. Y si bien no se siquiera si me gusta como hombre, me cuida. Me trata como a una reina aún siendo de la plebe. Y es difícil dejar pasar a alguien que te valora cuando ni vos misma sabes hacerlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario