
Se mucho de dolor. Se mucho de tristeza. Pero con el tiempo he llegado a ver que también se mucho de resistencia. Y aunque a veces no lleve el corazón encima por si me lo rompen, seguiré siendo como soy, niña peleadora. Viviendo a pleno. Ya sabes que se dice, sobrevivir es estar muerto y yo, prefiero andar a golpes que quedarme en un rincón llorando por lo que no tengo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario